Casi tan tradicionalmente español como la paella, el chocolate a la taza suele ser consumido complementado con churros. Sin embargo, podemos utilizarlo de muchas otras formas tanto en nuestro negocio.
¿Chocolate a la taza caliente o frío?
El chocolate a la taza se consume usualmente caliente, por eso se considera una bebida muy reconfortante y energética para cuando el clima es más frío. De hecho, hay quienes destacan incluso propiedades medicinales como son las siguientes:
- El cacao contiene muchos antioxidantes, lo que nos hace concluir que el chocolate a la taza si es de buena calidad puede ayudarnos a prevenir enfermedades cardiovasculares.
- Tomar una buena ración de chocolate a la taza es una forma segura de asegurarnos un buen porcentaje del calcio diario requerido, se dice que una taza aporta aproximadamente el 20%.
- Los antioxidantes también nos sirven para disminuir nuestros niveles de estrés.
- Las bebidas basadas en cacao, como es el caso del chocolate a la taza, también contribuyen a mejorar la circulación. De hecho, hay estudios que señalan que incluso ha mostrado efectos positivos en la conservación de la agilidad mental en personas adultas gracias a un mayor flujo de sangre al cerebro.
- Si el chocolate a la taza es preparado con una base de chocolate negro con alto porcentaje de pureza, también tiene un efecto saciador del apetito.
Todos estos beneficios serán mayores entre más puro sea el cacao utilizado, por lo tanto, es importante que escojas un buen proveedor de chocolate a la taza y no escatimar para ofrecer un buen producto.
Por supuesto, también se puede consumir frío, ya sea como bebida o como un ingrediente de otro postre.
Recetas para hacer con chocolate a la taza
La primera de las recetas que queremos compartir con vosotros es cómo preparar un flan de chocolate a la taza. La preparación es bastante sencilla.
Lo primero es tener unos 700 ml de chocolate a la taza, 300 ml de leche, 8 huevos no muy pequeños, 150 gramos de azúcar (aunque puedes endulzarlo con edulcorante si lo prefieres) y caramelo líquido si no tienes problema con el azúcar.
Para preparar el flan solo tienes que batir bien los huevos e ir incorporando el resto de ingredientes hasta que esté bien mezclado.
Lo siguiente es escoger un molde, preferiblemente de silicona, bañarlo con caramelo y verter la mezcla. Luego se coloca en el horno a baño maría a 200º durante unos 50 minutos. Cuando esté listo lo sacas del horno, lo dejas enfriar y lo mantienes en el frigorífico hasta el momento de servirlo.
Otra opción sería preparar chocolate a la taza y servirlo frío es ofrecer como postre Fresas bañadas en chocolate. Solo debes preparar el chocolate a la taza, no demasiado espeso, dejarlo enfriar y al servir se remueve bien, se pone en un recipiente pequeño y hondo. Las fresas pueden ir ya dentro del mismo recipiente o bien cortadas a mitades o cuartos, listas para pincharlas y darles un chapuzón en el chocolate a la taza.
Por supuesto, no podrían faltar en estas sugerencias el abrir la menta a preparar el chocolate a la taza con ciertos toques creativos como pueden ser:
- Chocolate a la taza con menta
- Chocolate a la taza especiado
- Chocolate a la taza con frutos rojos
- Chocolate blanco a la taza
Si a esto sumamos que también puedes ofrecer chocolate a la taza con buñuelos, con fartons, con pastitas dulces, vemos como el abanico de posibilidades para este producto sube.
Estas son solo algunas opciones para disfrutar el mundo de sabor y energía que nos puede proporcionar un buen chocolate a la taza. Tu imaginación es el límite.